«Lamento esta «confusión». Cuando me hacen un pedido, yo lo agendo, y a menos que el cliente expresamente lo cancele, en mi programa de trabajo está vigente. Pero ya leí tu correo a mi esposo y ya está cancelada tu orden».
Este mensaje que pareciera el final de una historia…es en realidad el inicio de un relato que habla del verdadero significado y relevancia del Thanksgiving Day o Día de Acción de Gracias.
¿Qué puede hacer alguien que se dedica a la gastronomía cuando le cancelan un pedido de dos pavos, con relleno y otros contornos? La respuesta la desconozco, pero sí puedo contar lo que hizo Morela Colina, de Morela’s Aji Dulce Catering.
Ella dijo «ya tengo los pavos descongelados, además son enormes y ocupan espacio en los congeladores, así que decidí prepararlos y buscar gente pobre para sorprenderlos».
La pregunta entonces: ¿a quién darle este abundante alimento? Primero pensó en personas que viven en las calles, pero ahora hace mucho frío y ellos se refugian en albergues donde ´pueden tener un lugar para descansar y comida caliente.
Paso siguiente, llamó a la iglesia donde va, donde acuden hispanos humildes, ahí la gente pobre se anota para recibir comida hoy, pero, gracias a Dios, este año no había nadie anotado para ayuda.
Pero siempre hay personas que conocen las necesidades de otras y alguien le contó la historia de una mujer a la
que el gato le comió parte del pavo. Ahí había alguien a quien poder ayudar, así que luego de un intercambio de números telefónicos, la señora del gato la llamó.
«Es una señora humilde, colombiana, y le di uno de los pavos que estaban preparados y listo para hornear. Le explique mi método y se fue muy contenta y agradecida», me explicó Morela vía email.
Listo el primer pavo, y parafraseando la canción de Serenata Guayanesa «La Pulga y el Piojo», alguien para el segundo pavo ¿dónde lo hallaremos?
Luego de cocinado, empezó la tarea de buscar a quien dárselo, pero ya por la hora los centros de caridad no contestaban el teléfono, así que valiéndose de las redes sociales, envió una nota por Facebook «a una profesora de inglés que sabe todo de aquí, de mi zona y le conté».
Esta persona le relató que conocía el caso de 2 chicas que viven en Houston, y que tenían la intención de casarse, pero como en aquella ciudad no existe el matrimonio gay, fueron a casarse donde sí es legal, pero no tenían dinero para una celebración pues todo se lo gastaron en el pasaje y los trámites y – además – sus familias no las apoyan. Estas dos jóvenes son estudiantes de música, así que ahí estaban las beneficiarias del segundo pavo, quienes luego de recibirlo se alegraron mucho, con el añadido que tuvieron como acompañamiento pan de jamón, porque una de ellas no solo es venezolana, sino oriunda de Barquisimeto, la tierra natal de Morela.
Este relato sirve para recalcar que el Día de Acción de Gracias es precisamente para eso, para agradecer a la vida, para apoyar a quienes lo necesitan y principalmente, para unir a los seres humanos en comunidad y solidaridad.
Pero… ¿y eso que tiene que ver con gastronomía?
Nada mejor que una historia de solidaridad para ahora contar cómo preparar y hornear un pavo, ya no solo para Thanksgiving Day o Día de Acción de Gracias, sino para los días de Navidad y Año nuevo, o para cualquier otra ocasión donde queramos celebrar en hermandad.
Morela Colina nos deja sus recomendaciones para que el pavo quede para «Dar Gracias».
Lavar el Pavo muy bien por dentro y por fuera frotándolo con sal y limón, Luego ponerlo bajo el chorro de agua fría para enjuagarlo, después secarlo con papel absorbente.
Esta es la camita sobre la que descansara el pavo en el horno: zanahoria, cebolla y celery
Colocar el pavo sobre la cama preparada, bañar con jugo de piña y sazonar con sal y pimienta
Rellenar el pavo con manzanas con piel, cortadas en cuartos
Rociar la piel del pavo con tu hierba aromática preferida: yo escogí para este caso el tomillo (thyme)
Mi secreto para que la carne del pavo quede jugosa y la piel húmeda y no se rompa tras varias horas de cocción: cubrir (brandar) el pavo con tiras de tocineta (bacon), de esta forma, Durante el horneado se irá derritiendo la grasa de la tocineta y finalmente se tostara. Cuando el Pavo esté cocido, las manzanas se habrán deshecho, retiras las tiras de tocineta tostadas y descubrirás la piel del pavo orada, brillante y entera. Con el jugo de la bandeja, que tendrá las manzanas cocidas, el sabor de la tocineta y el jugo de piña, lo cuelas para convertirlo en gravy.
Esa noche dormirá en el refrigerador, cubierto de papel film, y mañana tempranito al horno, entonces verán el resultado.
Así va mi pavo al horno
Después de 7 horas en el horno a 325 grados F, la tocineta quemada, la retiras con mucho cuidado y la desechas
Y así queda luego de retirar la tocineta: la piel bien dorada, brillante y la carne jugosa
De perfil
Las manzanas del relleno estarán suaves como compota. Sacas el pavo de la bandeja de hornear, y con las manzanas y los jugos de la cocción haces el gravy o salsa, colando todo y cocinando hasta que tenga la consistencia deseada y rectificando la sazón.
Así queda el pavo por dentro
Carne bien cocina, pero jugosa y tierna
PD
Gracias Morela por compartir no solo la receta, sino su historia, porque para esas personas el obsequio es más que un simple pavo es una razón para creer en el Ser humano, o esa es mi Visión Particular.
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