Pese a que los medios no cesan de impulsar los contenidos de Twitter, lo cierto es que en 2016 solo añadió a 14 millones de usuarios, alcanzando los 319 millones de usuarios. En cambio, Facebook añadió ese mismo año a 270 millones de usuarios únicos e Instagram a 150 millones.
No obstante, Facebook, aunque con sus 1.860 millones de usuarios sigue siendo la más grande del mundo, también tiene cada vez más difícil crecer.
Pero indudablemente el mayor estancamiento lo padece Twitter, incluso en Estados Unidos, donde la red social es constantemente citada en los medios de comunicación por el uso intensivo que hace de ella Donald Trump, la mayor parte de los nuevos usuarios provienen de fuera del país.
Algunos analistas consideran que el ocaso de Twitter se debe, entre otros factores, a que el 8,5% de las cuentas son bots tras los que no hay personas reales.
La falta de control sobre los trolls y una mala gestión forman una tormenta perfecta que nadie sabe cómo puede capear la red social.
En el plano económico la empresa ingresó 717 millones de dólares y obtuvo un beneficio de 143 millones. Unas cifras modestas si de nuevo las comparamos con las otras grandes redes sociales.
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