Hoy te traigo una propuesta, en realidad, son dos planes de ocio distintos para que salgas de la rutina y hagas algo diferente, que a veces hace falta. Se trata de dos actividades de enoturismo muy chulas perfectas para el buen tiempo y que te invito a probar, la primera de ellas yo la realicé en mayo, así que te cuento como fue mi día por si te apetece hacer la misma ruta.
Visita a la bodega El Regajal
El día de mi cumpleaños quise hacer algo diferente a la típica cena romántica (que también la tuve) y que me saliera a buen precio. Me puse a buscar bodegas cercanas a Madrid que organizaran visitas para ir un domingo, y encontré esta opción.
Viñedos de El Regajal
La bodega El Regajal está en Aranjuez, es una pequeña finca emplazada en la segunda reserva de mariposas más grande de Europa, por lo que las barricas están en el subsuelo. Nos recibió Juanjo, un chileno socio de la bodega que nos fue explicando de una forma amena todo el proceso de los vinos.
Primero nos mostró los viñedos y nos explicó particularidades de la tierra, como que, por su ubicación geográfica, en verano hace mucho calor durante el día pero por las noches refresca, lo que hace que la uva tenga una piel muy fuerte y por consiguiente mucho tanino. Después pasamos al edificio, donde probamos la primera mezcla de un caldo directamente de la cuba de metal que tenía apenas una semana reposando. La verdad es que estaba bastante fuerte.
Cata de caldo en la bodega
Luego nos llevó a la zona de las barricas donde explicó que las uvas que emplean en esta casa son tempranillo, cabernet saugvinon, merlot, syrah y petit verdot, y pudimos ver unas barricas que están apartadas donde se añeja el vino más especial de la bodega que solo se elabora en pocas cantidades, el Galia. No lo probamos pero la botella es una preciosidad, mírala:
Barricas
Juanjo nos narró anécdotas y experiencias que han tenido en las diferentes añadas para explicarnos el trabajo que realizan, no me voy a extender aquí porque resultaría aburrido, pero ya te digo que escucharlo en directo fue muy entretenido. Al final nos condujo a la sala de catas donde está la tienda también, y probamos los otros dos vinos que produce la bodega junto a una tabla de quesos y embutidos, el Regajal Selección y Las Retamas. No te daré una explicación técnica porque no tengo suficiente conocimiento para hacerlo, solo te digo que los dos vinos me gustaron mucho, aunque el primero con diferencia: era suave y con cuerpo, el sabor te quedaba en la boca. Es una delicia descubrir vinos así y tan cerca.
Juanjo Tarud
Vinos de El Regajal
En la tienda tienes la opción de llevarte alguna botella o no.
El punto que no te he contado es que toda esta visita nos costó 15 euros, económico ¿verdad? A mí me parece un plan original y a muy buen precio, así que si quieres reservar puedes llamar al 615 632 426 – 913 078 903.
Viñedos
Para completar mi plan cumpleañero, como la estancia en la bodega fue antes de la hora de la comida, optamos por irnos luego a un restaurante en Aranjuez llamado Venta San Isidro, un lugar muy familiar situado junto al río Tajo, con una fresca terraza y unos precios “solidarios”.
Así ya tienes un domingo diferente.
Terraza Venta San Isidro
Rutas con Wine Bus
A ver, este plan yo no lo he probado, pero no por falta de ganas, lo que pasa es que las rutas se hacen los sábados y yo ese día por lo general tengo jornada completa de trabajo. Pero lo recomiendo porque llevo aproximadamente dos años siguiéndolos por Facebook y me encanta lo que hacen.
Wine Bus es una empresa que básicamente te facilita la vida para que te lo pases bien sin preocuparte con las rutas que planifica, ¿por qué? porque sus planes consisten en disponer de un autobús que te espera en las fechas programadas en algún punto de Madrid (normalmente es la plaza Conde de Casal) para llevarte a visitar una bodega cercana en la que, además de conocer su proceso de trabajo, haces una cata; luego te llevan a comer a algún pueblo o lugar chulo y próximo e incluso, dependiendo de la ruta, alguna cosa más. Pasas el día entero con ellos, te bebes uno o varios vinos y no tienes que preocuparte por los controles de alcoholemia. Bien ¿no?
Laura Elena Vivas
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